El cuero de buey para el cinturón hecho a mano procede de la curtiduría tradicional inglesa Thomas Ware & Sons Ltd. La curtiduría es sinónimo de artesanía y calidad sin concesiones desde 1840. El cuero de buey original inglés, de unos 7-8 mm de grosor, es un material absolutamente impresionante. Ningún otro cuero tiene tanta resistencia y dureza. Los cinturones se fabrican exclusivamente con cuero de plena flor de curtido vegetal de la parte posterior de la piel, ¡el crupón! Esta es la parte más valiosa de la piel, ya que es donde la densidad de la fibra es mayor, lo que garantiza la longevidad del producto. Curtida en la fosa, la piel se corta normalmente en tiras largas en forma de caracol, se pasa por ojales redondos y se estira para fabricar correas redondas de cuero, que aún se utilizan hoy en día como correas de transmisión sólidas para diversas máquinas. Las variaciones en el grosor del cuero son posibles y no pueden descartarse debido a la naturaleza. El cinturón se completa con una hebilla de bronce hecha a mano. El cinturón es voluminoso y requiere amplias trabillas de al menos cinco centímetros de ancho. Cada cinturón es único, por lo que pueden producirse variaciones en el color y la estructura. El cuero, inicialmente claro, adquiere una hermosa pátina natural al tocarlo y exponerlo a la luz solar.
- Anchura del cinturón: 4 cm
Cinturón de cuero de buey Bertl con hebilla de bronce